El pasado 16 de octubre la artista Carmen Sevilla cumplía 91 años. Lo hacía desde la residencia Orpea de Aravaca (Madrid), donde vive desde el año 2015, aquejada de alzhéimer. Allí, intramuros, Carmen Sevilla recibe una perfecta atención, está muy cuidada y arropada. Solo dos personas la visitan semanalmente y están pendientes de su evolución, su hijo, Augusto Algueró, y su gran amigo y antaño hombre de confianza, Moncho Ferrer.

Los afectos siguen intactos. "La mimamos y le damos cariño. Este sábado vamos a ir su hijo y yo. Pero no solo el sábado, todas las semanas vamos. Su día a día es tranquilo y relajado y te expresa con los ojos. Carmen tiene una fortaleza increíble y todo sigue igual, afortunadamente", sostenía en octubre Ferrer al otro lado de la línea en conversación con EL ESPAÑOL.