El Mercantil de Sevilla, escenario del homenaje cultural a la marinería española

Este fin de semana se ha celebrado un concierto en el Círculo Mercantil de Sevilla en homenaje a los marineros,y trabajadores de la mar, para emprender junto un viaje musical por el vasto y misterioso océano.

Este concierto fue organizado por la Delegación de Sevilla de la Real Liga Naval Española y el Ateneo Social y Castrense hispalense.

Bajo la experta batuta de su director Roman García Diaz, con estos jovencísimos músicos han trabajado incansablemente, adaptando melodías relacionadas con el mar a su nivel musical, demostrando un compromiso y amor por la música que nos conmueve a todos.

Un concierto en un profundo homenaje a la conexión inquebrantable entre ser humano y el océano, con el título “Hombre de la Mar”.

Este recital, nos llevó por un viaje musical que nos llevó por países desde folclores escoces de “loch Lomonnd”, hasta las emocionantes aventuras de “Piratas del Caribe”. Nos deleitó con la elegancia del “Danubio Azul”, la calma de “Mooon River” y la suave brisa marina de “Carese Sur L'océan. Para cerrar con broche de oro, nuestra querida “ Salve Marinera”, un himno que resuena en el corazón de todo amante del mar.

Este concierto es un claro ejemplo de a que podemos llegar cuando instituciones y asociaciones unen sus esfuerzos. La Real Liga Naval Española, el Ateneo Social y Castrense de Sevilla, el Conservatorio Elemental de música de Triana, el Círculo Mercantil e industrial y la Comandancia Naval de Sevilla, han trabajado codo con codo.

Este concierto, no sería posible sin el desinteresado apoyo de muchas personas, como el Conservatorio Elemental de Musica de Triana,por el inmenso talento y la dedicación que nos brindó sus jóvenes promesas. El Círculo Mercantil e Industrial de Sevilla, por cedernos desinteresadamente estas magníficas instalaciones. A la Comandancia Naval de Sevilla, por todo el apoyo logístico que han hecho posible este magnífico concierto, demostrando una vez más su compromiso con la cultura y el legado marítimo.

Foto Antonio Rendón Domínguez